EL PEQUEÑO DESCUIDO DE URSULA

Ursula era una adolescente de quince años, que concurría al colegio Joaquín V. González, del barrio de Barracas. Vivía junto a sus hermanas menores, Cintia y Vanesa, y con su mama Silvia.
Esta joven quinceañera tenía una característica peculiar, era fanática de la lectura. Contaba con una biblioteca en su dormitorio, la cual estaba constituida por abundantes libros, entre ellos novelas, obras literarias y ciencia ficción.
Su materia favorita por supuesto era lengua y literatura, y por nada del mundo faltaba a las clases, porque su buena predisposición superaba cualquier síntoma de cefalea o dolor estomacal.
Un día la profesora, propuso a sus alumnos que realizaran un breve fragmento descriptivo con rasgos materiales de un libro, cuyo contenido los hubiera marcado en sus experiencias de lecturas. Esta era la oportunidad justa de Úrsula de poder mostrar sus dotes de lectora y escritora. Los trabajos debían ser entregados el 24 de octubre, los cuales iban a ser expuestos en una feria de carácter intelectual, que se realizaba en el establecimiento.
Con la clara consigna de lo que había que llevar a cabo, la joven partió entusiasmada a su casa. Una vez instalada en su dormitorio comenzó con la misión. Ese libro elegido se llamaba “mujercitas”. Era especial para ella porque había sido su primer regalo de cumpleaños por parte de una amiga y por serlo nunca dejo que sus hermanas lo leyeran. Tenía recuerdos grabados porque sus palabras estaban inscriptas en sus hojas. Su color era amarillo, contaba con una contextura pequeña y gruesa, en la tapa había una foto de una muchacha con una sombrilla y en la contratapa un breve resumen de la historia. Sus hojas finas y las letras de un tamaño normal facilitaban la lectura a Ursula. Se sentía identificada con las protagonistas de esa novela, cuatro hermanas que supieron llenar su alma, creía la historia como si fuera real, reía y lloraba con sus vivencias. Se imaginaba que su propia vida seria como una nivela, donde los personajes sufrían, superaban adversidades y luego terminaban felices.
Este libro, esencialmente le permitió escapar hacia otra realidad y convertirse en una de las hermanas March por un rato.
Una vez concluida la elaboración, lo único que ansiaba era que llegara el día de presentación, y así ocurrió. Su amanecer comenzó frío y con mucho rocío pero nada había de opacar ese día festivo en su colegio.
Sin embargo un olvido de Ursula hizo que despertara su ira, nervios incontrolados jamás sospechados en la conducta serena de la jovencita.
Cuando subió al colectivo, para dirigirse a la institución, recibió un llamado de su mama. Esta le comunico que una carpeta roja estaba en la mesa del comedor y que un folio sobresalía de ella. Al instante recordó que era su trabajo y completamente enloquecida bajo del transporte y corrió asta su casa. Nunca sintió algo parecido, puteo con todas sus ganas, la bronca la consumía lentamente.
Toda la dedicación en la producción del texto, parecía derrumbarse como una torre de naipes.
Trato de calmarse y pensar que solo era un descuido más, de los tantos que ocurrían en la vida cotidiana. Sin más que justificarse, lo tomo en sus manos y retomo la marcha.
Al llegar treinta minutos tarde, se dirigió al salón y la sorpresa la invadió. Sus compañeros y la profesora se encontraban en el. Apresurada se sentó en el pupitre y una compañera, a vos baja, le comento que el acontecimiento a llevarse a cabo había sido suspendido, como consecuencia del desperfecto de luz y sonido.
Anonadada Ursula, la abraso sin entender aquella porque lo hacia. Luego en el recreo le explico con lujos y detalles la desafortunada situación que había vivido.
Al pasar tres días la exposición se realizo, los trabajos recibieron una critica excelente, por parte de los espectadores presentes en el evento, que resulto un gran éxito.
En la memoria de la joven, quedaba atrás ese amargo momento y pensó como el problema que se le había presentado tubo un final feliz jamás imaginado, un final feliz tal como termino en su novela favorita.

ESCRITURAS DE LA NIÑEZ

Las primeras escrituras significativas que más recuerdo fueron plasmadas en un diario íntimo, cuando tenía doce años de edad. Comencé a escribir cosas personales relacionadas con la amistad, el amor, el colegio, a momentos negativos y/o positivos que transcurrían en mi vida porque creo que son hechos que resultan comunes a esa edad.
También recuerdo haber anotado esas situaciones lamentables que vivió el país a finales del año 2001, aquella debacle que significo la renuncia y huida del ex –presidente, Fernando de la Rua en ese famoso helicóptero. Siempre sostuve que lo que había experimentado, hizo que madurara de golpe y comprendiera la triste realidad.
Recuerdo que llegaba el domingo y comenzaba a escribir todos los sucesos que habían ocurrido en la semana. Los saqueos, lo que implicaba la destrucción de negocios y supermercados, la desesperación de las personas por agarrar un “pedazo” de carne que les tiraban desde camiones, como si fueran billetes de “100 pesos” y con lo que eso además acarreaba, golpearse, pelearse y pisotearse. Las represiones policiales, la instalación de un corralito económico, las abruptas llegadas y salidas de cinco presidentes en menos de una semana, que se comprometían a arreglar y levantar a la argentina, pero luego desaparecían como por arte de magia. La verdad nunca había experimentado algo de tan grande magnitud, era doloroso y sorprendente a la vez.
Solía hacerme preguntas y contestarlas, no se si estaban bien encaminadas pero por lo menos lo intentaba. A cada pie de página terminaba con una pequeña opinión y una de las que mas recuerdo perfectamente, era que lo que había pasado era porque ya estaba destinado. Pero deseaba que cuando fuera grande toda esa desagradable situación hubiese cambiado y que todos tuviéramos la oportunidad de progresar profesional y económicamente en la vida.
Esta fue la experiencia más importante, la cual a través de la escritura aprendí a crecer emocional, mental, y personalmente.
Mas adelante, allá por el año 2005 cuando cursaba el primer año de polimodal, contaba con un taller de periodismo en el cual realizaba redacciones. Los temas eran libres a elección o bien los podía inventar. También tuve la oportunidad de hacer una entrevista, a un paciente recuperado de las drogas en un centro de rehabilitación. Una vez concluida la ordene, expuse una importante introducción con una mirada subjetiva sobre la drogadicción y quedo explicita como un texto informativo y a la vez explicativo.

MALVINAS UN RECUERDO QUE JAMAS SE OLVIDA

PRIMER RELEVAMIENTO: TESTIMONIO DE SILVANO DECIMA (EX –COMBATIENTE).

Como prisionero la historia de silvano empezó a escribir una pagina hasta ahora guardada en secreto bajo la custodia de soldados ingleses. El vivió una experiencia peor aun que la mismísima guerra. Cuenta que pasando un día lo sacaban diciendo que ya iban a salir hacia Puerto Argentino para volver a la Argentina. Pero llegado un momento lo separaron con otro compañero tres ingleses, y los llevaron para el otro lado de una montaña cerca del aeropuerto.
Sostuvo que a ese compañero lo violaron y con el quisieron hacer lo mismo. Lo obligaron a que se agachara y como se resistió, le pegaron con la culata de un arma en la nuca y cayo inmediatamente descompuesto. Luego despertó y se dirigió hasta donde estaba un grupo de soldados argentinos.
Relato que fue 27 años de Malvinas que vivió. “cuando hay algo adentro que no te lo podes sacar no te deja un camino libre para poder seguir haciendo algo, porque adentro de esa tristeza o dolor, hay recuerdos que no se van”. Exclamo a viva voz el valiente Silvano.

SEGUNDO RELEVAMIENTO: “CUANDO LOS INGLESES NOS DIERON LAS ISLAS”.

En 1974 Gran Bretaña instalo una propuesta a través de su embajada en Buenos Aires, en la que establecía una especie de condominio de las islas por 25 años, terminados los cuales pasarían al dominio absoluto argentino.
Reino Unido tendría la mitad de la soberanía y argentina la otra, flamearían las dos banderas, los idiomas oficiales serian el ingles y el español y el gobernador seria nombrado alternativamente por la reina de Inglaterra y por el presidente argentino.
La propuesta inglesa tuvo como interlocutor al tercer gobierno de Juan Domingo Perón, que encontró en el presidente a su principal interesado. Pero no fue bien recibida por las ideas nacionalistas que dominaban en las Fuerzas Armadas, como en sindicatos y hombres del poder político, el caso del entonces ministro de bienestar social y jefe de la “A”, José López Rega.
Sin embargo mientras la oferta de Reino Unido, que fue propuesta el 11 de junio, parecía atractiva, el escenario político de la región era muy poco alentador. El 1 de julio la muerte de Perón termino por complicarlo todo y la posibilidad de reconquistar pacíficamente las Malvinas fue quedando en el olvido.
Después vino la historia conocida y una guerra que nos termino de alejar de las islas. A 27 años del desembarco militar en Malvinas, a nadie escapa que si en 1974 se hubiera aceptado la propuesta británica de condominio, en 1999 la argentina habría conseguido la soberanía total sobre ellas, sin odios, sin muertos, sin cementerios, ni guerra.

cien años de soledad

Si de grandes aventuras literarias mas fascinantes del siglo xx se tratan, Cien Años de Soledad de Gabriel Garcia Marquez, fue la que marco mi experiencia en la lectura.
Al principio no fue idea mía comenzar a leerla, porque me atemorizaba observar su voluminosidad y creía que nunca podría terminar de leer abundantes paginas.
Y fue para entonces cuando en el año 2005, la profesora de lengua y literatura nos pidió que consiguiéramos el libro, con el cual íbamos a trabajar toda la mitad de año. Por suerte no tuve la necesidad de comprar una nueva edición, porque una amiga vecina me lo presto.
Al comenzar con la lectura me resulto extraño como empezaba: “muchos años después frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevo a conocer el hielo. Porque estaba acostumbrada a escuchar e incluso a leer de pequeña en otros cuentos e historias palabras como “había una vez”, “érase una vez”.
En ese momento comprendí que no era una lectura mas, como otras que muchas veces se tratan de aventuras que hacen sobre volar la imaginación, de fantasías, efectos especiales o ciencia ficción; esta era una novela literaria que la sentí “real”, le pasaban a personas de carne y hueso.
A medida que avanzaba en los capítulos, hacia pausas para realizar cuestionarios, deducir reflexiones y así poder lograr que la historia sea fácil entenderla, ya que por momentos el árbol genealógico de la familia Buendía-Iguaran era confuso, como también sus enredos y conflictos cotidianos.
Los vigésimos capítulos los termine de leer en un lapso de cuatro meses(seguramente los hubiera terminado antes si no habían once materias mas que cursar) los cuales me brindaron la posibilidad de mostrar que no solo la aventura fabulosa de esos protagonistas, con sus milagros, fantasías, obsesiones, tragedias, incestos, adulterios, rebeldías, descubrimientos y condenas transcurren en líneas, sino que también representan al mismo tiempo el mito y la historia, la tragedia y el amor del mundo entero.
Por lo tanto si tendría que resaltar algo importante sobre todo esto, no es cuanto o como uno lee, sino como enfrentamos lo que el universo de lectura nos tiene preparados, para crecer como lectores.